Las características de inmutabilidad y transparencia de blockchain son particularmente valiosas para aumentar la confianza de los ciudadanos en los resultados electorales.
Ventajas del voto digital basado en blockchain
- Seguridad.
- Inmutabilidad.
- Transparencia.
- Velocidad en el conteo de votos.
- Aumento en la confianza ciudadana.
La adopción de la tecnología en los procesos democráticos es un tema cada vez más relevante. La digitalización del voto presenta una oportunidad única para mejorar la transparencia, la accesibilidad y la seguridad en las elecciones.
Históricamente, la democracia ha evolucionado desde la antigua Grecia hasta la actualidad, pero sigue enfrentando retos significativos, especialmente en cuanto a garantizar que todos los ciudadanos puedan participar de manera justa y libre.
En el contexto actual, las elecciones requieren procesos que aseguren la integridad y la confianza en los resultados. Las tecnologías de la información juegan un papel crucial al ofrecer herramientas que pueden mejorar la transparencia y la confianza en los procesos electorales. Un ejemplo notable es la propuesta en México para incorporar el voto electrónico para los residentes en el extranjero, según la Ley General de Instituciones y Procedimientos Electorales (LGIPE), Artículo 329.
El voto digital promete varias ventajas, como la accesibilidad y la transparencia. Sin embargo, plantea desafíos importantes en términos de ciberseguridad, accesibilidad y legitimidad. La tecnología blockchain se presenta como una solución viable para registrar votos de manera transparente e inmutable.
Al tener características de inmutabilidad, la tecnología blockchain puede asegurar que cada voto sea registrado y contabilizado sin posibilidad de manipulación, ofreciendo un nivel de transparencia sin precedentes.
Otra de las ventajas de la Web3 es la descentralización, esta podría reducir el riesgo de manipulación o interferencia por parte de actores malintencionados y aumentar la resiliencia del sistema contra ataques, al no depender de una única entidad central para administrar y verificar los votos, ya que la blockchain es mantenida por una red de nodos independientes.
No obstante, la implementación del voto digital enfrenta obstáculos significativos. La accesibilidad es uno de los mayores retos, ya que no todos los ciudadanos tienen acceso a internet o dispositivos adecuados para votar digitalmente. La inmutabilidad y la ciberseguridad de los registros en blockchain son áreas bien documentadas y, aunque presentan desafíos, la tecnología puede resolverlos. Sin embargo, la operatividad del voto digital requiere una legislación adecuada y garantizar el acceso a la tecnología para toda la población.
En el ámbito de la Web3, las votaciones basadas en blockchain son comunes en las organizaciones autónomas descentralizadas (DAO). Estas experiencias pueden servir de referencia para diseñar un sistema de voto digital a gran escala. Pero, más allá de la tecnología, es crucial capacitar tanto a la población como a los legisladores para adoptar y regular este cambio.
El gobierno y la sociedad civil deben de encontrar maneras de comunicar eficientemente las ventajas del voto digital y trabajar hacia un marco legislativo que apoye esta transformación. Sólo a través de una combinación de tecnología avanzada, legislación adecuada y educación cívica se podrán realizar elecciones verdaderamente democráticas y transparentes en la era digital.
SOBRE EL AUTOR
Luz Margarita Saucedo Monarque, originaria de Nogales, Sonora, completó su formación en Ingeniería Industrial en Administración en la Universidad de Sonora. Después de roles docentes en Mexicali y Tijuana, destacándose en la dirección de Servicios Escolares, obtuvo una maestría en Administración Internacional, un doctorado en Educación y una maestría en Diseño de Proyectos Educativos Virtuales. Pionera en la era informática, desde analista de sistemas hasta cofundadora de Micro Control Digital, Luz Margarita ha mantenido su entusiasmo por las tecnologías de la información y la comunicación. Actualmente, colabora con el ICP Hub LATAM, contribuyendo al desarrollo de programas de certificación en el Internet Protocol, y aboga por una formación ética en tecnología.