Aunque la economía descentralizada aparentemente no está vinculada con las finanzas tradicionales, el temor de una recesión en Estados Unidos y el aumento de las tasas de interés en el mercado japonés afectaron el precio de las principales criptomonedas.
¿Por qué cayeron las bolsas mundiales y las criptomonedas?
- Estados Unidos reportó la tasa de desempleo más alta desde octubre de 2021 junto con un crecimiento del empleo más débil de lo esperado.
- El mercado de valores de Japón sufrió su peor caída en 37 años.
- Los análisis indican que el temor de una recesión en Estados Unidos, aunado a factores macroeconómicos globales, ocasionan que los inversores se alejen o vendan algunos de los activos de mayor riesgo, como pueden ser los criptoactivos.
El mercado de valores de Japón se desplomó un 12% el lunes 5 de agosto, su peor día en 37 años. La gravedad de la caída provocó pérdidas en los mercados bursátiles de todo el mundo. En Estados Unidos, por ejemplo, el índice Nasdaq cayó más del 6%, mientras que el S&P 500 cayó un 4,25%.
Desde entonces, los mercados se han recuperado ligeramente. El Nasdaq subió un 1,5% el martes, mientras que el Nikkei 225 japonés cerró un 10,2% más que al comienzo de la jornada. Pero aún pueden quedar semanas difíciles por delante.
Una razón clave para estos mercados bajistas es el temor a una desaceleración de la economía estadounidense. Los datos del mercado laboral de Estados Unidos publicados el 2 de agosto informaron la tasa de desempleo más alta desde octubre de 2021 junto con un crecimiento del empleo más débil de lo esperado. Esto ha provocado que se extienda el pesimismo entre los inversores sobre una inminente recesión en la mayor economía del mundo.
El presidente de la Reserva Federal de Estados Unidos, Jerome Powell, ha sugerido que se puede esperar un recorte de los tipos de interés en septiembre. Las tasas de interés más bajas generalmente significan préstamos más baratos y deberían impulsar el crecimiento económico.
Sin embargo, el enfriamiento del mercado laboral estadounidense en julio ha llevado a especular que la Reserva Federal ha esperado demasiado para actuar. Los bancos centrales de otras economías desarrolladas, como el Banco de Inglaterra y el Banco Central Europeo, ya han recortado los tipos de interés.
Las acciones de las empresas de tecnología, tanto en EE.UU. como en otros lugares, también cayeron. Y los mercados de criptomonedas también entraron en declive. El precio del líder del mercado de criptomonedas, bitcoin, cayó por debajo de los 50.000 dólares estadounidenses después de cotizar cerca de un récord de 70.000 dólares estadounidenses hace apenas una semana.
Otros criptoactivos, como Solana (SOL) y Dogecoin, también experimentaron una caída de precio de hasta un 30% durante el mismo periodo.
Esta venta masiva de criptomonedas se ha atribuido en gran medida a los mismos temores de una recesión en Estados Unidos que provocaron una breve caída del mercado de valores. Sin embargo, desde una perspectiva financiera, este efecto de contagio es particularmente interesante.
La criptomoneda fue diseñada para ser independiente de cualquier autoridad centralizada. Su objetivo era ofrecer una forma alternativa de dinero y un activo de inversión inmune a los defectos del sistema financiero tradicional.
Esto era cierto hasta cierto punto antes de 2017, durante los primeros días de la adopción de las criptomonedas. Según una investigación publicada en 2018, los mercados de criptomonedas estaban relativamente aislados y ‘desacoplados’ de los mercados tradicionales.
Sin embargo, con el tiempo, las criptomonedas se han integrado más en el sistema financiero y ya no son inmunes a los efectos de volatilidad de los mercados no criptográficos.
Una investigación separada analizó la respuesta de bitcoin a los anuncios de tasas de interés de EE.UU. y encontró que la intensidad de la respuesta a las noticias de política monetaria depende del tipo de activo digital.
Las criptomonedas que están estrechamente relacionadas con la ‘moneda’ en su función, como bitcoin, deberían responder con fuerza a los anuncios de la Reserva Federal. Estas criptomonedas se utilizan mucho para transacciones financieras y, por lo tanto, es probable que sean sensibles a los cambios en la demanda de los consumidores y al entorno económico general. Ambos factores están influenciados por la política monetaria.
Por otro lado, los llamados protocolos criptográficos como Ethereum sirven principalmente como plataformas sobre las cuales se pueden construir una variedad de productos criptográficos, como los tokens no fungibles (NFT). En teoría, el precio de un protocolo debería tener una respuesta más lenta y menos severa a los anuncios de política monetaria en comparación con las criptomonedas ‘puras’.
Sin embargo, los criptoactivos en todas las categorías han experimentado una caída unificada en los primeros días de agosto. El precio de Ether, por ejemplo, cayó a su punto más bajo de 2024 el 5 de agosto, lo que demuestra que el pánico financiero puede transmitirse rápida y eficientemente a todos los mercados. El atractivo popular de las criptomonedas de descentralización e independencia de las finanzas tradicionales simplemente no se sostiene.
El valor de una criptomoneda también depende en gran medida del sentimiento de los inversores, y las noticias y los anuncios en las redes sociales desempeñan un papel crucial a la hora de darle forma. Por lo tanto, es posible que las criptomonedas respondan aún más severamente a tales shocks que los propios mercados bursátiles.
¿Se recuperarán los criptomercados?
Los criptoactivos son volátiles, lo que los hace atractivos para algunos inversores que aceptan el riesgo. Los precios actuales pueden ser bajos, pero los inversores en criptomonedas están acostumbrados a la volatilidad y, como ocurre con cada caída, están evaluando si ahora es un buen momento para comprar.
El problema es que el análisis técnico (interpretación de las tendencias de precios al alza y a la baja) suele ser muy inexacto en cualquier mercado. Y es posible que los precios tengan margen para caer aún más, dado que las criptomonedas únicamente han caído por debajo de sus máximos históricos.
Algunas investigaciones académicas sobre las criptomonedas concluyeron que, como las criptomonedas no tienen un valor fundamental, el verdadero precio de bitcoin es cero. Esta idea puede parecer hoy descabellada. Pero un colapso total del valor sigue siendo un escenario plausible en el futuro para muchos criptoactivos.
Cualquier información nueva, como anuncios de tasas de interés, eventos políticos como las elecciones estadounidenses o una mayor adopción de criptoactivos por parte de inversores institucionales, puede alterar rápidamente la dirección de los precios de las criptomonedas.
SOBRE EL AUTOR
Larisa Yarovaya es profesora asociada de Finanzas y directora del Centro de Finanzas Digitales de la Southampton Business School, de la Universidad de Southampton, Reino Unido. Con una profunda experiencia en finanzas internacionales y fintech, Larisa ha contribuido significativamente al panorama académico, siendo autora de más de 70 artículos y coeditora del libro ‘Cryptocurrency and Blockchain Technology’. También es la presidenta y organizadora fundadora de la Conferencia anual de investigación de criptomonedas, establecida en 2018 y que crece hasta convertirse en la conferencia académica de nicho más grande en criptomonedas y DeFi.
