La decimosegunda edición del evento más antiguo de cripto y blockchain de Latinoamérica alcanzó su récord de visitantes. En las dos jornadas sobresalieron el optimismo del ecosistema y la variedad de temáticas expuestas.
- En un marco festivo, más de 10.000 asistentes recorrieron los stands, en los que prevalecieron las propuestas lúdicas.
- Destacó la variedad de temáticas brindadas por los más de 400 expertos: desde aspectos técnicos y regulatorios, hasta tópicos poco transitados como el impacto de las nuevas tecnologías en la salud mental.
- Se aprovechó el evento para realizar una muestra de arte digital y para presentar BullRun, la primera película tokenizada de la historia.
Los números podrían hablar por sí solos: más de 10.000 asistentes, unas 260 charlas dadas por alrededor de 400 expositores y hasta el aval del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, que incluyó el evento dentro de su TECWeek, la primera edición de una semana dedicada a las tecnologías emergentes.
Pero lo que hace diferente a Labitconf, evento cripto, blockchain y web3 que se celebra hace doce años en la capital argentina y que tuvo lugar en dos jornadas, el 1 y el 2 de noviembre pasados, es su atmósfera.
La creatividad de los stands convierten el sitio en una suerte de parque de diversiones. Bitget instaló una cabina en la que vuelan cupones que los participantes deben capturar. Binance, un panel con ocho monedas adheridas magnéticamente que caen en un orden aleatorio y que el jugador debe atajar antes de que toquen el piso. BingX, una variedad de “Los ocho escalones” siendo necesario responder correctamente las preguntas en la pantalla para avanzar.
El espíritu festivo domina la escena: un conjunto de pantallas vintage amontonadas que dan información del evento, personas haciendo flexiones de brazos debajo de un cartel que dice “holdéate y gana”, jóvenes con camisetas de fútbol esperando ansiosos la presentación del histórico goleador uruguayo Diego Forlán (que se presentó promediando la tarde de la primera jornada), un bitcoin gigantesco que camina por el predio, los ya tradicionales neones de “In code we trust” y de “In math we trust”…
Un inicio revelador
Durante los días previos, se estuvo generando cierta expectativa en las redes sociales respecto de que en la charla de apertura podría develarse datos sobre la identidad del creador del Bitcoin. De hecho, el keynote llevó como nombre “Satoshi Nakamoto live at Labitconf”. El “secreto” fue expuesto por Rodolfo Andragnes, fundador de Labitconf y presidente de la ONG Bitcoin Argentina: “Satoshi somos todos, cada vez que perpetuamos el misterio de la cara y del nombre real del líder cripto”, bromeó.
Por los siete escenarios hubo un desfile incesante de expertos. En el principal, The Ocean, los contenidos abarcaron múltiples aristas. Desde aspectos sociales (cómo el impacto del ecosistema cripto en el desarrollo o incluso en la democracia de los países) hasta el impacto económico del bitcoin en el mundo, pasando hasta por una meditación con cuencos tibetanos, cuarzos y gongs.
En Startup se concentraron los consejos prácticos para emprendedores en aspectos como desarrollo, metodologías ágiles, legales, marketing, armado de proyectos o comunicación, mientras que en Workshop se puso manos a la obra en la creación de soluciones. El espacio Academy brindó una introducción al mundo Bitcoin y numerosas charlas técnicas. Los debates sobre regulación, futuro, modelos de gobernanza, inteligencia artificial y otros temas polémicos se reunieron en Ágora, ubicada estratégicamente en el medio del predio.
Coders se enfocó en cuestiones meramente vinculadas a la tecnología y Creadores a todo lo vinculado con el mundo de los contenidos. “Este evento se consolidó en cantidad de asistentes y calidad de los contenidos abriendo más y más fronteras de conocimiento”, resume Andragnes.
Premios a la creatividad
El espacio para creadores (Whabbit), impulsado por la plataforma independiente de contenidos Flixxo, multiplicó sus propuestas respecto de años anteriores.
Además de las charlas (se tocaron temas como la IA y su impacto en el arte, la tokenización digital y física, el modelo SocialFi, la tecnología, el cine y la cultura web3 o los derechos de autor) hubo una muestra de obras digitales (en el marco de los premios B-Arte, que se entregaron sobre el cierre de la primera jornada) y se estrenó BullRun, la primera película tokenizada: un documental humorístico que trata, por supuesto, sobre el boom de las criptomonedas. Entre otras cosas, se podía acceder adquiriendo un ticket 3.0 (que a su vez ofrecía recompensas y contenidos adicionales).
Pero lo más interesante, tal vez, es que se pusieron manos a la obra: el desafío CreaCon propuso a un grupo de jóvenes migrar su proyecto de web2 a web3. Hubo un panel especial sobre un tema no siempre considerado en este tipo de eventos: el impacto de las nuevas tecnologías sobre la salud mental.
“Queremos que sea mucho más que tecnología: que sea un espacio donde artistas de verdad se encuentren, compartan y exploren juntos qué significa volver a empezar, para replantearnos el camino”, explicó en un comunicado Andrea Meneses, una de las responsables de este espacio.
Múltiples miradas
Labitconf es, ante todo, un punto de reunión y de networking. En ese sentido, la multiplicidad de miradas enriquece la discusión. “Me alegra ver que este año se sumaron también representantes del gobierno para contribuir al debate abierto y transparente, regular inteligentemente a los proveedores de servicios virtuales y seguir creciendo como industria”, señaló Julián Colombo, director general del exchange Bitso Argentina.
“Este año, el evento se destacó por una energía renovada y una visión más aterrizada en el potencial del ecosistema cripto”, aporta Mariano Rubinstein, CEO y cofundador de la plataforma de juegos y eSports Sura Gaming. “Hubo un enfoque marcado en la utilidad real de los proyectos, especialmente en gaming blockchain, con un interés genuino en construir de forma sustentable en Latinoamérica”, aportó.
“Me llamó la atención la diversidad del público: incluyó adolescentes y personas mayores, hombres y mujeres... una mezcla de perfiles impresionante”, relató Adrián Garelik, CEO de Flixxo. “En general, estos eventos suelen estar dominados por hombres de entre 30 y 45 años: los institucionales de traje y corbata y los developers de bermudas y ojotas, por lo que el logro de Labitconf de haber llegado a una audiencia variada y heterogénea es espectacular”, afirmó.
El ambiente fue electrizante, con una energía increíble impulsada por la efervescencia del ecosistema cripto en Argentina, la combinación de debates sobre innovación y regulación, la presencia de actores internacionales y una atmósfera llena de optimismo”, confirmó Min Lin, nuevo CBO del exchange BitGet.
Labitconf 2024 es pasado. Labitconf 2025 ya es promesa. “Vamos a incorporar muchos cambios y va a ser muy diferente a todas las ediciones anteriores”, juega al misterio Andragnes.
