En la era de Web3, la tokenización de activos emerge como un fenómeno que redefinirá la forma en que valoramos y comerciamos con una variedad de bienes.
Beneficios de la tokenización de activos físicos
- La tokenización consiste en la representación de activos físicos o digitales, mediante tokens en la blockchain.
- Ofrece la posibilidad de fraccionar en forma de tokens cualquier tipo de activo, como obras de arte, propiedades u otros bienes.
- Democratiza los mercados de inversión para que más personas puedan participar y no sea algo exclusivo para inversores de gran patrimonio.
- Brinda mayor liquidez y facilita la compra y venta rápida de activos.
Cuando hablo con alguna gente sobre tokenizar objetos, deuda, productos financieros o activos, no me creen. No consideran que será algo que tendrá preponderancia en un futuro cercano. El tema a menudo no se entiende, ni se sabe con qué se come. Es aburrido.
Para mí es fascinante.
El mercado de activos tokenizados podría alcanzar los $10 billones de dólares en un escenario ‘alcista’ y $3,5 billones en el escenario ‘bajista’ para 2030, según el gestor de activos digitales 21.co.
En la era de Web3, la tokenización de activos emerge como un fenómeno que redefinirá la forma en que valoramos y comerciamos con una variedad de bienes. ¡Díganme si eso no es emocionante!
Desde el arte digital hasta las bienes raíces, la tokenización está llevando la propiedad y la inversión a un nuevo nivel y, sobre todo, está democratizando el acceso a activos que antes estaban reservados para unos pocos privilegiados. ¿Qué significa eso?
La tokenización, en esencia, implica representar la propiedad de un activo físico o digital mediante tokens en la blockchain.
Estos tokens, a menudo denominados tokens no fungibles (NFTs), otorgan derechos de propiedad, es decir, el activo en físico será tuyo y el token representará eso. Es así de fácil.
Uno de los aspectos más emocionantes de la tokenización de activos es su capacidad para democratizar el acceso a inversiones previamente inaccesibles.
Antes, sólo inversores con mucho capital podían acceder a comprar un edificio, una obra de arte genuina, algo caro, pues.
Con la tokenización, la propiedad fraccional, es decir, en ‘pedacitos’ o en ‘porciones’, se convierte en una posibilidad real para el ciudadano común y corriente que a lo mejor no posee mucho capital y por tanto jamás tendría acceso a comprar un edificio, mucho menos un cuadro de Picasso.
¿Imagina poseer una fracción de una pintura famosa o un pequeño porcentaje de un rascacielos en una metrópoli? La tokenización hace que estas oportunidades sean accesibles para una audiencia más amplia.
No voy a hablar de NFTs porque es lo que la mayoría de nosotros conocemos. Quiero hablar sobre el mercado inmobiliario. La posibilidad de dividir propiedades en tokens permite a los inversores participar en proyectos inmobiliarios sin tener que comprar una propiedad completa. Esto no solo diversifica las oportunidades de inversión, sino que también liquida los activos, ya que los tokens son más fácilmente transferibles y negociables en comparación con la venta de propiedades enteras.
Además de la accesibilidad, la tokenización aborda cuestiones de liquidez. Anteriormente, la inversión en activos ilíquidos, como bienes raíces, implicaba compromisos a largo plazo. Sin embargo, los tokens pueden facilitar la compra y venta de activos de manera más eficiente, permitiendo a los inversores entrar y salir con mayor flexibilidad. Es decir, realizar compras y ventas más rápidas.
A pesar de estos beneficios, la tokenización de activos no está exenta de desafíos. Aún no existe regulación en la mayoría de los países y eso puede generar incertidumbre en torno a la legalidad de estas transacciones.
Citemos algunos países que están liderando en el tema:
- Singapur en el sector financiero
- Estonia en la gobernanza
- Malta y su regulación
- Dubái y los metales preciosos
- Corea del Sur en el área de identidad digital
¿Y América Latina?
Pues va bien. Colombia ha lanzado algunas iniciativas de tokenización en agricultura. México y Brasil le están apostando al mercado inmobiliario. Argentina ha lanzado algunos programas de fidelidad.
Sin embargo, la seguridad y la custodia de los activos tokenizados son preocupaciones críticas. El extravío de claves privadas o la vulnerabilidad de las plataformas pueden resultar en la pérdida irreversible de estos activos digitales valiosos. Es la realidad. Tenemos que hablar de fraudes, estafas y demás. Existen y seguirán existiendo.
No obstante, la tokenización de activos está transformando radicalmente la manera en que interactuamos con el valor. A medida que exploramos este emocionante territorio de Web3, es esencial equilibrar la innovación con la responsabilidad, asegurando que la tokenización siga siendo una fuerza positiva y accesible para todos.
SOBRE EL AUTOR
Mónica Taher es empresaria en tecnología y graduada de UCLA. Elegida por Bloomberg Línea como una de las personas más influyentes en Latinoamérica en el área de los negocios, fungió como directora de Tecnología e Innovación de Negocios para InvestSV en el Gobierno de El Salvador. Actualmente, es accionista y VP de Marketing de RocketFuel, una empresa de pagos en cripto.